El tema de la consideración del aborto como algo normal produce situaciones que podríamos calificar de paradójicas, si no tuviesen como resultado situaciones de vida o muerte.
El Tribunal Constitucional español tiene pendiente resolver dos recursos contra la Ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo. La norma fue recurrida en 2010 por 71 diputados del Grupo Popular, encabezados por Federico Trillo, y por el Gobierno de Navarra, en manos de UPN. Han pasado 5 años
En este tiempo se han producido, diversos avatares políticos en el Grupo Popular, la defenestración del ministro Gallardón por su proyecto de restricción del aborto, la no inclusión en las listas de ese mismo grupo para las recientes elecciones nacionales de los diputados o senadores que habían defendido el no al aborto.
Por su parte el partido Ciudadanos, no sólo se manifiesta partidaria del aborto, sino que en el examen a candidato para afiliarse al partido se pregunta expresamente sobre este tema. Si se es partidario de la vida, se le excluye la posibilidad de afiliarse.
Pues bien, en esta situación de la clase política española en la que parece que sólo se puede pertenecer a ella si se está a favor de poder atentar contra la vida del nasciturus, el Tribunal Constitucional se desmarca reconociendo al nasciturus como miembro de una familia.
El pasado 17 de diciembre el pleno de este alto Tribunal sentenció que en los procesos de admisión de alumnos de centros docentes no universitarios mantenidos con fondos públicos, los alumnos cuya madre se encuentre en estado de gestación, obtendrán la puntuación que les correspondería si ya hubiera nacido su nuevo hermano (o hermanos, si se trata de gestación múltiple).
O sea, que el nasciturus ya es hermano, y por tanto miembro normal de una familia, pero al mismo tiempo se puede acabar con su vida. Lo cual parece llevar a concluir que es más importante el proceso administrativo de acceso a un colegio que la misma vida humana en el seno materno.
Seguramente me podrán hacer muchas matizaciones pero los hechos, son los hechos, y a mí, al menos, me parecen paradójicos, cuando no esperpénticos.
Les deseo a todos un feliz año nuevo.
Comments 2
Es mejor aplaudir la sentencia que criticarla, para reforzar todo lo positivo.
Tienes toda la razón en que debería haber matizado para señalar los aspectos positivos. Gracias