Resumen
La formación de médicos en México enfrenta desafíos éticos graves, como maltrato, agotamiento, riesgo de adicciones y trastornos emocionales. La residencia médica agrava estos problemas con jornadas extenuantes y vulneración de sus derechos laborales.
Es crucial un análisis ético que revise las jornadas laborales de los médicos residentes, promueva el bienestar y fomente una cultura de respeto. La Ley Federal del Trabajo reconoce a los residentes como trabajadores, pero sus derechos son frecuentemente ignorados.
Se requiere armonizar las normas y educar a los profesionales sobre sus derechos. La formación ética es esencial para un sistema de salud justo y equitativo.
Los autores declaran no tener ningún conflicto de interés.
Introducción
La formación de médicos en México es un pilar fundamental para garantizar el acceso a servicios médicos de calidad, un derecho humano esencial y un objetivo clave del desarrollo sostenible. Sin embargo, la realidad plantea serios desafíos éticos que merecen atención urgente.
Los médicos en formación en México se enfrentan a situaciones adversas que impactan su bienestar y desarrollo profesional como:
Estrés y sobrecarga: la exigencia académica, la presión por el rendimiento y la competencia constante generan niveles elevados de estrés, ansiedad y depresión.
Maltrato y abuso: docentes que perpetúan prácticas de dominación y maltrato, creando un ambiente que normaliza y perpetúa el abuso.
Agotamiento y adicciones: largas jornadas, falta de descanso y presión emocional pueden conducir al abuso de alcohol, bebidas energéticas y otras sustancias, con graves consecuencias para la salud.
Deterioro del bienestar: aislamiento social, distanciamiento familiar y la pérdida de actividades recreativas afectan el desarrollo biopsicosocial de los jóvenes médicos.