Una pareja de israelitas ha acudido a los tribunales de Haifa para presentar un contrato de una madre de alquiler y conseguir ser abuelos mediante fivet.
Su hijo falleció en un accidente en 2010 a la edad de 27 años, y no había dejado ningún documento de voluntades anticipadas. Sus padres razonan:«Dimos a sus órganos, ¿por qué no usar su esperma?». Por eso llevan tres años intentando que su petición sea escuchada
En un comunicado del Ministerio de Justicia israelí, el Fiscal General considera que, en este caso particular, el uso de esperma se justifica porque es «el deseo de satisfacer los más profundas y fundamentales deseos humanos».En 2009, en un caso similar, el ex Fiscal General Menachem Mazuz se opuso a la petición de los padres. Su hijo de 22 años, que murió de cáncer, dio su esperma a un banco. Los padres también tenían un contrato con una mujer que su hijo no había conocido. Finalmente, un tribunal aprobó su petición.
Estamos ante una variante de la valoración de la fecundación in vitro como una técnica para la satisfacción de un deseo de un matrimonio, o de una pareja o de una persona soltera o viuda.
Por eso me gustaría preguntar: ¿Si se tiene derecho a ser padres, por qué no a ser abuelos?
Un couple israélien fait valoir son «droit í un petit-enfant» aprí¨s la mort de leur fils