Un senador ruso ha propuesto prohibir tanto la maternidad subrogada comercial como la altruista. Anton Belyakov, del pequeño partido Una Rusia Justa, compara la subrogación comercial con la prostitución, que está prohibida. «Es inmoral y provoca daños a la madre y al hijo´´, declaró en la revista Women and Girls News Deeply.
Según News Deeply, la subrogación está teniendo un alcance considerable. Vladislav Melnikov, director de uno de los Centros Europeos para la Subrogación (European Center for Surrogacy), observa que 2,000 hijos nacieron en Rusia durante 2016. A nivel nacional hay cerca de 100 centros de subrogación, incluyendo 40 en Moscú.
El incentivo financiero para una subrogación comercial es cuantioso. Las profesoras, una profesión común para las mujeres, cobran sólo US$700-850 al mes. Sin embargo, el pago para una madre gestante es de alrededor de US$14,000, cerca del salario de 18 meses.
«De conformidad con la legislación rusa, madre gestante sólo puede serlo aquella que ya haya tenido un hijo, por lo que con frecuencia vienen mujeres que necesitan dinero para alimentar a sus hijos, especialmente cuando sus maridos han abandonado la familia´´, relató el gerente de una agencia de subrogación en San Petersburgo. «La mayoría de ellas deben pagos a crédito o hipotecas al banco.´´
El director del Centro del Derecho y la Ética Reproductiva (Center for Reproductive Law and Ethics), Konstantin Svitnev, ha descrito la Federación Rusa «como una especie de paraíso reproductivo, al ser el país cuya legislación es la más favorable para los padres de intención o comitentes, donde ninguna ley federal específica regula aspecto alguno de la reproducción asistida.´´ Sin embargo, una ley exigua o incompleta puede dar lugar a una situación de gran incertidumbre.
Al respecto de la maternidad subrogada existe una confrontada opinión pública. La jerarquía de la Iglesia Ortodoxa Rusa se muestra amargamente crítica. Cuando una diva del pop ruso, Alla Pugacheva, entonces de 64 años y su marido de 37, tuvo dos hijos por maternidad subrogada, un portavoz relevante de la iglesia manifestó: «es una rebelión contra Dios; es un felicísimo fascismo con un contrato, el dinero y la confiscación de un hijo´´.
Bioedge, Michael Cook. 27 de enero 2018, Russian surrogacy, controversial and unregulated