Feminismo, género, y «perspectiva de género» no son equivalentes, aunque en muchas ocasiones se les quiera presentar como sinónimos.
Como es conocido, el feminismo es una corriente de pensamiento y de acción social y jurídica que desde finales del siglo XIX, y sobre todo desde 1960, ha defendido la reivindicación de los derechos de las mujeres desde su condición de personas humanas en ese sentido iguales a los varones. Se trata de una defensa no sólo «de iure«, sino «de facto«.
Como también es sabido, ambos aspectos: la teoría y la práctica, no se producen al mismo tiempo, y todavía nos encontramos en la necesidad de reivindicar muchos aspectos de la vida laboral y social en los que las mujeres no gozan de iguales posibilidad que los hombres.
El término género en español se utiliza en un sentido muy amplio como agrupación por características comunes, por ejemplo el género de la ópera o de la zarzuela. A las personas humanas se les considera varones o mujeres según el sexo. Se utilizan expresiones de género masculino para los varones y de género femenino para las mujeres.
A partir de publicación de El Segundo Sexo(1960), de Simone de Beauvoir, y de La mística femenina(1963), de Betty Friedan, entran en el feminismo otras cuestiones como el concepto de sexualidad, el papel de la maternidad, y la verdad sobre la familia.
Poteriormente se comenzó a utilizar en el mundo anglosajón el término género (ingl. gender) con un sentido técnico específico, que se ha extendido a otras lenguas, entre ellas el español. Así pues, en la teoría feminista, mientras con la voz sexo se designa una categoría meramente orgánica, biológica, con el término género se alude a una categoría sociocultural referida al role que el varón o la mujer desempeñan en la sociedad.
Parece evidente que este rol está muy influido por la cultura de cada momento. La cultura que tiene un papel de transmisión de la sabiduría aquilatada por el paso del tiempo, también transmite junto a modas, desigualdades e injusticias que pueden ser aceptadas como normales en ese momento. La sociología, la antropología, y la biología, tienen un papel imprescindible para deslindar lo que corresponde a construcción social que puede o debe cambiarse y lo que corresponde a la realidad misma del ser hombre o mujer.
La «ideología de género«, resuelve está dificultad de un plumazo. El principio de partida -afirmación que no necesitaría ser demostrada por evidente- es que la diferencia sexual entre el hombre y la mujer es irrelevante. Por tanto cualquier institución social que la tenga en cuenta es opresora para el hombre, y debería desaparecer. De aquí que la familia que se construya sobre esa diferencia sexual debe ser «deconstruida» -término amable para decir «destruída»-. Otras instituciones como la educación o las iglesias deberían pasar por el mismo proceso de «deconstrucción«.
La «perspectiva de género» se ha convertido en un eslogan necesario para aparecer como defensor de las libertades personales. Sin embargo esta «perspectiva» implica aceptar la «ideología» como foco desde el que contemplar la realidad. No es raro que las legislaciones o instituciones que la adoptan entren en un proceso de desconcierto respecto a lo que quieren promover, y que tan sólo tengan claro lo que quieren destruir.
Posiblemente sería más fácil luchar contra las injusticias evidentes basadas en las diferencias sexuales, si se siguiese el consejo de la Real Academia de la Lengua. «Es inadmisible el empleo de la palabra género (…) como mero sinónimo de sexo. (…) Para las expresiones discriminación de género y violencia de género existen alternativas como discriminación o violencia por razón de sexo, discriminación o violencia contra las mujeres, violencia doméstica, violencia de pareja o similares.»
Me parece que sería más efectivo para la lucha contra la violencia utilizar los términos concretos que todos entienden: violencia contra la mujer, o violencia con los homosexuales, por ejemplo.
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Francisco José Ramiro
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Comments 5
Esto no coresponde; muy mala interpretación de lo que es «la perspectiva o enfoque de género».
Evidentemente el concepto de género no está aludiendo necesariamente al sexo, sino, a lo que culturalmente se ha ( y se está) construyendo respecto a lo que es masculino y femenino.
¿Que es eso de ideología? ustedes saben realmente que es conceptualmente una ideología?
Me parece que en el artículo se usa correctamente el concepto de ideología, distinguiéndolo de lo que es perspectiva, y por supuesto no identificándolo con el concepto de género.
Patético post. Supura misoginia.
Ahora todo es perspectiva de genero…femenino. Mejor perspectiva de persona.