Este año marca el centenario del nacimiento de un hombre que es en gran parte desconocido para el público en general, pero cuyo legado intelectual tiene una profunda influencia en la vida diaria: John Money (1921-2006), el psicólogo estadounidense nacido en Nueva Zelanda que inventó la idea de la llamada identidad de género.
El 5 de julio de 2017, Ulrich Kutschera (imagen de la izquierda) en una entrevista, publicada en una revista católica en línea kath.net para hablantes de alemán, sobre un tema controvertido en ese momento: el matrimonio entre personas del mismo sexo y el derecho de estas parejas a adoptar niños. Resumió las duras consecuencias que tuvo que enfrentar como resultado de sus declaraciones públicas, con referencia al amargo legado de Money.
En el texto alemán, “ Ehe für alle? Diese widersinnige Entscheidung überrascht mich nicht ”(¿ Matrimonio para todos? Esta decisión sin sentido no me sorprende ), se refirió a su entonces popular libro Das Gender-Paradoxon ( The Gender- Paradoxon ), en el que había dedicado muchas páginas a Money y su ideas, incluido su fallido experimento de 1965 de reasignación de género (castración de bebés). Usó a David y Brian Reimer como sujetos experimentales. Estos hermanos gemelos, nacidos en 1965, se suicidaron más tarde.
Además, con referencia al concepto de John Money de «pedofilia afectiva» que él apoyó explícitamente, es decir, interacciones eróticas no violentas entre niños y homosexuales adultos, habló también de los posibles problemas cuando los hombres que se sienten atraídos exclusivamente por los cuerpos masculinos adoptan a un niño menor de edad, con quienes no están relacionados genéticamente (relación padrastro, efecto Cenicienta, abuso infantil emocional, ausencia de la madre, etc.).
La entrevista desató un clamor entre los estudiantes alemanes vinculados a los movimientos LGTB y transgénero. Como resultado, rápidamente siguió una acción coordinada contra la integridad de Ulrich Kutschera como científico, con artículos negativos en los medios y una tormenta en Internet.
Finalmente, en diciembre de 2017, el Staatsanwaltschaft Kassel, donde vivía, abrió un caso judicial en su contra. Se basó en la absurda acusación de que el biólogo había inventado (o «manipulado») hechos y datos biomédicos con el objetivo criminal de desacreditar a las parejas homosexuales, que son, según la narrativa popular, iguales o superiores a una madre biológica y su esposo.
Después de varias rondas de audiencias judiciales públicas en 2019, 2020 y 2021, fue absuelto de todos los cargos el 2 de marzo de este año, con el vigoroso apoyo de un excelente abogado.
El juez del Landgericht Kassel explicó en detalle que sus declaraciones están protegidas por el derecho a la libertad de expresión, independientemente de que sean o no verdaderas.
Debido a que la prensa sensacionalista alemana ( Bild-Zeitung , Die Welt , Hessenschau.de , etc.) seguía afirmando que Ulrich Kutschera supuestamente «distribuía hechos biológicos falsos«, respondió con un libro de 588 páginas publicado en octubre: Strafsache Sexualbiologie. Darwinische Wahrheiten zu Ehe und Kindeswohl vor Gericht (Caso penal sobre biología de la sexualidad: verdades darwinianas sobre el matrimonio y el bienestar infantil en los tribunales).
Primero resume la vida y los logros del héroe y el villano de esta historia: Charles Darwin (1809-1882) y John Money, respectivamente. También realiza un perfil del biólogo ruso Konstantin Mereschkowski (1855-1921), que puede haber tenido tendencias pedófilas, pero sin embargo fue un científico de clase mundial y el padre espiritual de la teoría de la simbiogénesis.
Luego se describe la base biológica de la reproducción sexual biparental, la paradoja darwiniana de la homosexualidad y los dos usos de la palabra pedofilia. El primero es la «pedofilia afectiva» de Money y el segundo es el trastorno mental de la «pedofilia erótica», como lo definió en 1901 el psiquiatra austriaco Richard von Krafft-Ebing (1840-1902). Documentó que el «trastorno de la preferencia sexual» de Krafft-Ebing, causa un gran daño a la víctima, ya sea niño o niña, y la noción de Money de «exceso de amor paterno» no violento, son fenómenos biológicos distintos, aunque pueden producirse algunas coincidencias.
Este llamado “amor por las niñas o los niños” (el significado original de la palabra pedofilia) existe casi exclusivamente en los hombres, aunque el “excedente erotizado de amor paterno” de Money también puede ocurrir en algunas lesbianas. Existiendo varias referencias a este último.
Y luego describió la caza de brujas que experimentó en la corte. Todos sus argumentos, que se basaban en sólidas publicaciones científicas y monografías, fueron ignorados por los fiscales del Estado. Estaba en el ring contra la ideología de género cuasirreligiosa inventada por John Money. Descubrió que este sistema pseudocientífico se ha convertido en un dogma en la política alemana dominante.
Resumiendo los principios básicos de la ideología de identidad de género de John Money. Su creencia fundamental es que los humanos son construcciones sociales con características biológicas maleables. Puede resultar difícil apreciar lo radical que es esta noción. Desde que apareció la obra maestra de Darwin, Sobre el origen de las especies , en 1859, la evolución ha sido el marco científico dominante para el comportamiento humano.
La ideología de género coloca a Darwin en la basura. Ciento cincuenta años de ciencia, la ciencia a la que Ulrich Kutschera ha dedicado su vida, fueron descartados ante dichas acusaciones. La gente se preocupa por los campesinos sureños que creen en la “ciencia de la creación”. Esto es mucho peor. Se considera que los humanos son seres sociales sin un pasado evolutivo; hombres y mujeres son miembros iguales del mismo clon genéticamente idéntico.
Sorprendentemente, las personas transgénero son la norma y no la excepción. Cambiar el sexo biológico de hombre a mujer (o viceversa) es posible y bueno para una persona trans. Los cromosomas X e Y, las hormonas sexuales y los órganos sexuales primarios (testículos, ovarios) tienen una importancia secundaria.
Además, la homosexualidad y la heterosexualidad son sólo formas diferentes de hacer el amor. Los niños no necesitan una madre y un padre; dos homosexuales, gays o lesbianas, pueden realizar la misma labor de cuidado con la misma eficacia. La adopción, la fecundación in vitro o la gestación subrogada están bien, aunque los padres biológicos no tengan ninguna participación. Los niños nunca preguntarán por su ascendencia; no necesitan una familia natural con hermanas, hermanos, tíos y abuelos.
Y significativamente, el abuso infantil, ya sea físico, emocional o sexual, ocurre con tanta frecuencia en familias naturales como en hogares de homosexuales y lesbianas. Finalmente, la afectuosa pedofilia de Money, a la que me se refirió el biólogo en su controvertida entrevista, puede ser beneficiosa y útil para los niños bajo la custodia de ciertos homosexuales, que se llaman a sí mismos “amantes de los niños”.
Durante las audiencias judiciales, refutó todas estas afirmaciones irracionales (como ha documentado en el libro de Strafsache ). También presento como prueba un artículo de MercatorNet, “Una combinación tóxica: pedófilos, granjas de bebés y matrimonio entre personas del mismo sexo”. A pesar de que esto relataba una historia de horror documentada de abuso de pedófilos en Australia con detalles sangrientos, el fiscal del estado nuevamente no quedó impresionado.
El mensaje del fiscal era sencillo: olvida la biología humana y todos sus hechos inconvenientes. La ideología de la identidad de género enmarca la nueva visión posmoderna del mundo. Los darwinistas anticuados (como usted) deberían ser castigados por distribuir falsas afirmaciones «biologistas» sobre el sexo y el género, especialmente en lo que respecta a las parejas homosexuales, a las que se considera como padrastros y modelos ideales para los niños.
Finalmente, es posible citar a la filósofa británica Kathleen Stock, quien se vio obligada a abandonar su puesto en la Universidad de Sussex como resultado de agresivos ataques de activistas transgénero. “Fue una experiencia medieval”, escribió.
Ulrich Kutschera atreve a decir que su caza de brujas en Alemania fue peor, mucho peor. La Universidad de Sussex apoyó en gran medida el derecho de Stock a la libertad de expresión. Pero cuando él fue aterrorizado y atacado por activistas LGBT y transgénero, ni su antigua Universidad ni ninguna agencia estatal vinieron a rescatarlo.
La razón es clara: la ideología de identidad de género posmoderna de John Money domina la opinión pública en Alemania.
Dado que los fiscales del Estado ( Staatsanwaltschaften ) están bajo el control de los políticos alemanes, en particular del Ministerio de Justicia, se espera que hayan más cargos en contra del biólogo. Confía en que la verdad prevalecerá. Como saben las víctimas de persecución LGBT y trans, el proceso es el castigo. Pero no se encuentra desanimado. ¡Seguirá luchando por Darwin (quien fue el padre amoroso de diez hijos), las ciencias evolutivas y la biología humana!
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Publicada en Bioedge por Ulrich Kutschera | 13 de diciembre de 2021 | Meet the German biologist hauled into court for critiquing ‘gender identity’
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